La diabetes insípida es una condición que resulta de la producción insuficiente de la hormona antidiurética (ADH), una hormona que ayuda a que los riñones y el cuerpo conserven la cantidad correcta de agua. Normalmente, la hormona antidiurética controla la producción de orina en los riñones. El hipotálamo (una glándula pequeña ubicada en la base del cerebro) secreta la ADH, la cual se almacena en la glándula pituitaria y luego se libera en el torrente sanguíneo. La secreción de esta hormona tiene por objeto disminuir la cantidad de orina para que no nos deshidratemos. La diabetes insípida causa sed excesiva así como también una producción excesiva de orina muy diluida. La enfermedad se caracteriza en grupos:
Varias condiciones pueden causar diabetes insípida, incluidas las siguientes:
A continuación se enumeran los síntomas más comunes de la diabetes insípida. Sin embargo, cada niño puede experimentarlos de una forma diferente. Los síntomas pueden incluir:
Los niños que padecen diabetes insípida también pueden presentar los siguientes síntomas:
Los síntomas de diabetes insípida pueden parecerse a los de otras condiciones o problemas médicos. Siempre consulte al médico de su hijo para el diagnóstico.
Además del examen y la historia médica completa, incluyendo el consumo diario de líquidos, el régimen alimenticio y los patrones de micción del niño (eliminación de las sustancias en la vejiga y el intestino), los procedimientos de diagnóstico para la diabetes insípida pueden incluir:
Si no se la trata durante la infancia, la diabetes insípida puede provocar daños cerebrales, deterioro de la capacidad mental, retraso mental, hiperactividad, lapso de atención corto y/o inquietud. El tratamiento de la diabetes insípida depende de la causa de la enfermedad. Por lo general al tratar la causa se trata también la enfermedad. El tratamiento específico de la diabetes insípida será determinado por el médico del niño basándose en lo siguiente:
El tratamiento puede incluir medicamentos tales como la hormona antidiurética modificada (frecuentemente suministrada como pulverizador nasal) o medicamentos que estimulan la producción de la hormona antidiurética. Además, las personas con diabetes insípida deben mantener un consumo de líquidos adecuado para compensar la cantidad de orina y mantener una dieta baja en sodio. A pesar de que los niños que padecen la enfermedad también necesitan beber grandes cantidades de líquidos, debe controlarse la cantidad de sodio contenida en los líquidos que consumen.
La diabetes insípida puede ser temporal o permanente, según cuál sea la causa de la enfermedad. Con un control apropiado, los niños que padecen diabetes insípida central pueden llevar una vida plena y saludable. Los niños con diabetes insípida nefrogénica también pueden llevar una vida relativamente normal con el control y los cuidados correctos, especialmente si recibe atención médica a temprana edad.
Haz click aquí para ir a la página de
Recursos en la Red de La Diabetes y Otros Trastornos Endocrinos y Metabólicos